Signo de interrogación

signos de puntuación de una pregunta
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El signo de interrogación es un signo de puntuación que indica que la oración que le sigue o precede es una pregunta. Su origen gráfico se encuentra en el latín: la palabra «cuestión» viene del latín questio, o pregunta, abreviado como «Qo».[cita requerida] Esta abreviación se transformó en el signo de interrogación. A su vez, el latín tomó la grafía del signo de interrogación del púnico-cartaginés a-khar, equivalente al questio latino.

Signos de apertura y cierre de interrogación

En la mayoría de los idiomas se utiliza un único signo de interrogación al final de la frase interrogativa: How old are you? (Inglés: ¿Cuántos años tienes?). Este fue el uso habitual también en español, hasta mucho después de que la segunda edición de la Ortografía de la Real Academia, en 1754, declarase preceptivo iniciar las preguntas con el signo de apertura de interrogación invertido, (¿) y terminarlas con el signo de interrogación ya existente (?) –¿Qué edad tienes?–, al tiempo que se ordenaba lo mismo para los signos de admiración (¡) y (!. Este criterio, en realidad, no se generalizaría hasta casi un siglo más tarde, ya que desde esa fecha de mediados del siglo XVIII hasta mediados del XIX la Real Academia Española no tuvo, ni mucho menos, el carácter corporativo e institucional que le iba a conferir la monarquía isabelina posteriormente. Las imprentas siguieron editando según la costumbre: ubicaban solamente un signo al final de las frases interrogativas o exclamativas[cita requerida]. Si los signos iniciales se extendieron en las tipografías, no se debió a que el español tenga el problema de que no se sabe en qué momento se inicia la frase interrogativa o admirativa (la sintaxis de otras lenguas también desconoce ese momento), sino al carácter forzoso que dio la monarquía a los criterios de la Real. La norma de los signos de interrogación y exclamación iniciales fue impuesta, simplemente, de la mano de la Gramática oficial de la institución monárquica. Su carácter compulsorio estaba limitado al muy reducido ámbito idiomático de España (ver, por ejemplo, la resistencia de Chile). Una solución intermedia muy corriente consistió en utilizar los signos de apertura sólo cuando el enunciado era largo, o con riesgo de ambigüedad, pero no para las frases breves y claramente interrogativas, como Quién vive?[cita requerida].

La influencia del inglés está haciendo retornar este viejo criterio[cita requerida]. Incluso, es común que en las salas de chat o conversaciones en línea en español se use solamente el signo (?) para preguntar, ya que la velocidad es uno de sus criterios relevantes. La omisión del signo ahorra tiempo al teclear, sobre todo frases breves. Esto podría no tener gran importancia debido a que se está utilizando en conversaciones informales, aunque a veces también es omitida en situaciones formales tales como informes, ensayos y en el lenguaje publicitario. [cita requerida]

A pesar de que ha caído en desuso por ser escasas las ocasiones en que resulta oportuno, en español es correcto enmarcar una frase con la apertura de la admiración (¡) y el cierre de la interrogación (?), o viceversa, en casos que compartan claramente lo admirativo y lo interrogativo, como ¡Quién te has creído que eres?. Sin embargo, la Academia prefiere el uso de ambos signos para la apertura y cierre:[1]¡¿Quién te has creído que eres?!.

En obras de carácter enciclopédico es usual el uso de la interrogación para indicar fechas inciertas. Un ejemplo sería Gengis Kan (¿1162?-1227).[2]

Otro idioma en que se utiliza la apertura del signo de interrogación es el catalán [1]

Hay muchas lenguas que teniendo una relación tan estrecha con el español, como el asturiano, el aragonés o el extremeño, utilizan sólo el signo de cierre.

Véase también

Notas

Bibliografía

  • José Antonio Millán (2005). Perdón, imposible (Guía para una puntuación más rica y consciente). Barcelona, RBA editores. ISBN 84-7871-773-0. 

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