El Uvieta de Carmen Lyra era un anciano; el de Alberto Cañas, un joven excéntrico en torno al cual se desarrolla una trama de tintes policíacos y una contemplación de lo que sería el mundo si nadie se muriera, todo tratado con abundante fantasía y un humor explosivo y penetrante. De las quince obras teatrales que su autor tiene estrenadas, probablemente Uvieta (Premio Nacional Aquileo J. Echeverría de Teatro en 1980) ha sido la de más duradero éxito, como lo prueban los innumerables montajes que de ella han hecho grupos aficionados y colegiales, a más de las presentaciones profesionales del Teatro Universitario de la Universidad de Costa Rica.
Pues... obra de teatro cortita que juega en clave de humor con el sentido de la muerte y la vida.
Me gustó la referencia y transformación de la fábula de la muerte y el peral (o era el manzano?). Por su parte, el vocabulario me sacó un poco de quicio.
En fin, 2 estrellas sobre 5 porque no da para más.
Basada en un cuento tradicional escrito por Carmen Lyra. Esta versión dramatúrgica no dista mucho del cuento de Lyra, pero le incorpora nuevos elementos entretenidos a la historia.
Un libro corto, con una historia divertida que enseña que la vida de todos debe tener un fin. Utiliza lenguaje coloquial costarricense que lo hace más auténtico y acogedor.